Las voces de nuestra niña interior

Nuestra niña interior tiene la clave para nuestra realización personal y nuestra felicidad porque en ella reside todo nuestro potencial. Por un lado, guarda las memorias de nuestra alma y de aquello que hemos sido. Y, por otro lado, recoge todos nuestros dones y talentos, y todo lo que podemos llegar a ser. A un nivel espiritual, es la semilla de la Diosa en cada una de nosotras, y aprender a escuchar el modo en que se comunica con nosotras es parte de nuestro camino de desarrollo personal.

En esta nueva píldora de sabiduría femenina para la vida cotidiana hablamos sobre nuestra niña interior. Y el modo que ella tiene de comunicarse con nosotras.

Es una píldora que hago en respuesta a las dudas que me habéis ido planteando en esta comunidad de mujeres conscientes que estamos creando juntas.

Espero que te ayude y disfrutes de ella… y ya sabes, si tienes cualquier pregunta ¡te leo en los comentarios!

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Esta nueva píldora de sabiduría femenina para la vida cotidiana que hoy te traigo es una respuesta a las dudas que me habéis ido planteando en esta comunidad de mujeres conscientes que estamos creando juntas.

En concreto es una respuesta a la pregunta que me hacía Eva Fernández sobre: ¿Cómo saber qué hay que sanar? ¿Cómo liberarnos de las heridas?

A esta segunda pregunta te diré que el mejor modo de sanar una herida es poniendo mucha luz y mucha conciencia, y sabiendo escuchar las voces de nuestra niña interior.

La niña interior tiene la clave para tu realización personal y tu felicidad porque en ella reside todo tu potencial.

Por un lado, guarda las memorias de nuestra alma y de aquello que hemos sido. Y, por otro lado, recoge todos nuestros dones y talentos, y todo lo que podemos llegar a ser. A nivel espiritual, es la semilla de la diosa en cada una de nosotras.

El problema es que todas, absolutamente todas, hemos sufrido de pequeñas porque el amor y la atención que recibimos no se adecuaba a lo que necesitábamos. Eso siempre causa algún tipo de daño emocional.

Los adultos no estamos preparados para cuidar y amar a los más pequeños porque también somos mayores hambrientos de amor y cuidado. Por eso es tan sanador hacerte responsable de ti misma, desde la adulta que eres conectar con tu niña interior, y poner toda tu atención y conciencia en atender todas sus necesidades no satisfechas.

La niña interior tiene un modo muy directo de hablarnos: en aquellas áreas o facetas de tu vida que no funcionan como a ti te gustarían, allí la niña interior tiene algo que decirte.

Esto es así porque la niña interior es el conjunto de todas nuestras potencialidades en estado puro y, por tanto, desde ellas alcanzaríamos la realización en y todas las áreas de la vida. Cuando en una o varias de estas áreas no conseguimos vivir plenamente, entonces nuestra niña interior herida está alzando su voz para que sea escuchada.

Aunque todas encarnamos con talentos y potencialidades únicas, ya desde el útero de nuestra madre comenzamos a interiorizar toda una serie de patrones, creencias, sentimientos, emociones y actitudes… que proceden de lo que vamos integrando al relacionarnos con los otros. Y a medida que crecemos vamos generando una serie de corazas para proteger a nuestra niña interior y ese tesoro único que tenemos dentro.

Y es ahora, en la edad adulta, que todas nuestras relaciones tienen el cometido de despertar todo ese material inconsciente que está en nuestro interior para que podamos mirarlo y sanarlo, si es necesario. Nos sirven de espejo para que comencemos a romper esas corazas.

Y cuando hablo de relaciones no solo me estoy refiriendo a personas. También es la relación que tienes contigo misma, con tu cuerpo, la casa en la que vives, el coche que conduces… ¿Te ocupas de ti misma? ¿Tienes una buena alimentación? ¿Una buena higiene? ¿Eres capaz de conectar con tu belleza? ¿Descuidas tu casa, el arreglo del coche?

Por su puesto, las relaciones incluyen tu entorno más cercano: tu pareja, tus hijos, tus padres, tus amigos, tus compañeros de trabajo… ¿entras fácilmente en conflicto con ellos? ¿Reaccionas y creas separación? ¿Cuándo algo te hace saltar todos los resortes eres capaz de ver tu parte de responsabilidad? Porque ahí la herida se está abriendo y te está mostrando el modo que tienes de autosabotear tu propia felicidad.

La primera pregunta que me hacía Eva era cómo poder sanar esas heridas. La única respuesta que yo puedo darte, desde mi experiencia, es ponerle mucha luz, mucha conciencia y mucho amor.

Cuando empezamos a vivir desde la ciclicidad, no sólo de nuestro cuerpo de mujer, sino también desde la ciclicidad de la tierra, podemos aprovechar los momentos en los que vamos hacia adentro, hacia la oscuridad para mirar esas sombras. A un nivel corporal este momento es muy claro: es nuestra fase pre-menstrual. Es el momento en que nuestra chamana, nuestra bruja interna nos está gritando que hay algo urgente que hay que atender, porque lo que ella quiere es que seas la mejor versión de ti misma, y que transformes a esa niña interior herida en la niña interior mágica que lo merece absolutamente todo.

Y si además acompañas esta observación con un registro mensual, esos patrones y heridas empezarán a emerger de un modo muy claro.

Rosa Mística

Manifestar la vida que deseamos

La vida que deseamos

Las mujeres poseemos una enorme capacidad de creación y manifestación por el hecho tan sencillo de tener útero. El problema es que nos hemos desconectado de él y del poder que tenemos por derecho de nacimiento. En el artículo de esta semana te cuento cómo volver a recuperarlo.


Mes a mes tenemos la capacidad de conectar con nuestra energía creativa (que no es otra cosa que nuestra energía sexual interna), vaciar nuestro útero (nuestro cuenco de creación) y sembrar las semillas de lo nuevo que deseamos ver manifestado en el plano material.

Las mujeres de las sociedades ancestrales y, en especial las sacerdotisas de los templos de Isis, lo sabían bien y desarrollaron rituales preciosos para ayudar a las mujeres a manifestar la vida que deseaban.

En estos rituales hacían un trabajo consciente de activación del útero y del fuego creativo que habita enroscado en él: nuestra Kundalini. Además, eran muy consciente de que el útero reproduce el ciclo de la naturaleza para crear. Utiliza la unión de las dos energías (la femenina y la masculina), sin la cual no existiría la vida. Y también la alquimia de los elementos. Todo el ritual tenía lugar en sus cuerpos.

Además, sabían que nuestro útero se mueve al compás de nuestro satélite. Danzar con las fases de la Luna se convertía en parte fundamental de estos rituales.

  • Las sacerdotisas de los antiguos templos de Isis sabían que las lunas oscuras eran momentos de limpieza, vacío y quietud para conectar con la inspiración creativa.
  • Los días de Luna nueva era momentos de siembra de las semillas de los sueños que deseaban materializar.
  • De Luna creciente eran los momentos más propicios para accionar y dar vida a esos sueños.
  • Los días de Luna llena eran momentos para parir al mundo material esos sueños, mientras que
  • los días de Luna menguante eran momentos de introspección. Días para analizar aquello que no se había manifestado, volver a darle un nuevo impulso creativo o preparar el útero para soltarlo y dejarlo ir… Para volver a ciclar de nuevo…  

Las antiguas sacerdotisas de Isis sabían también que el viaje que realiza la luna a través de las constelaciones era igualmente importante para conocer la energía disponible y más propicia para sembrar las intenciones de sus sueños.

Sabían leer la bóveda celeste. Entendían que formaban parte de un todo interconectado: lo que es arriba es abajo y lo que dentro es fuera.  

Conocedoras de este enorme poder, las sacerdotisas se reunían cada luna nueva en círculo sagrado para celebrar el ritual de manifestación y hacer magia con sus cuerpos.

En la escuela online, como fieles seguidoras de estas tradiciones milenarias, trabajamos estos rituales de la manifestación.

Tienes a tu disposición el taller online Mujer creadora | El arte de la manifestación y el taller online La luna como mapa de manifestación.

Y además, con el inicio del nuevo año, comenzamos un círculo de mujeres online cada luna nueva. Para ayudarnos entre todas a manifestar las intenciones que sembramos durante el Solsticio de Invierno. Será un proceso que durará un año entero, hasta el siguiente Solsticio de Invierno y, seguro, será transformador para cada una de nosotras.

Si sientes la llamada y deseas participar, estaremos encantadas de contar con tu presencia. Será el sábado, 25 de enero, a las 10h (hora española). Escríbeme y te cuento todos los detalles y cómo acceder.

La vida que deseamos


Inake-Habitarte ciclica-Escuela online

La vida que deseamos

Alimentación en Invierno

Alimentación en invierno.

Durante los meses de Invierno, nuestra energía tiende a volcarse hacia el interior y nuestro organismo necesita descansar un poco más. Para que podamos nutrir la energía vital adquirida (Jing) que proviene de lo que comemos y respiramos. Esta energía se va progresivamente almacenando para poder después salir al mundo cuando llegue la Primavera.


Para la Medicina Tradicional China, el Invierno es una estación regida por el elemento Agua, que representa el origen de la vida y el inicio de todo nuevo ciclo.

El agua une, funde y armoniza. Representa la paz, el amor universal, la compasión y las emociones más profundas del ser. Nos recuerda que la vida es flujo y cambio constante. El agua nos da la capacidad de adaptarnos a los ciclos de la naturaleza y a las situaciones de nuestra vida. Nos aporta flexibilidad.

El agua constituye la energía Yin máxima y, en el cuerpo, está representada por los riñones y la vejiga. El fondo marino, donde se manifestaron las primeras formas de vida. O el momento de la gestación nos ilustran con claridad este período de evolución a partir del agua.

La energía del agua se agota con el «calor» del estrés y el exceso de emociones densas. La mejor forma de conservar la energía potencial del agua es estar tranquila y en quietud.

Durante el Invierno, la clave de una buena alimentación es seguir el curso de la naturaleza. Además de prestar atención a la energía Yang en el cuerpo. Recuerda: si fuera hace frío (Yin), nosotras contrarrestamos con su polaridad, generando más calor (Yang) en nuestro organismo.

Los alimentos remineralizantes y que generan calor interno son especialmente beneficiosos para la salud, en general, y el fortalecimiento de nuestro sistema inmunológico, en particular. Igualmente, es importante incorporar los alimentos que pueden fortalecer la energía del riñón y mejorar la capacidad del cuerpo para resistir el frío.

Evita los alimentos crudos durante el Invierno tanto como te sea posible. Tienden a enfriar el cuerpo. Es momento de recuperar las ollas y cazuelas, y cocinar a fuego lento. Las sopas calientes, los granos integrales y los frutos secos tostados ayudan a calentar el centro del cuerpo y mantener la energía Yang. Bebe, además, agua a temperatura ambiente o en infusiones durante el día.

Es la época de las legumbres, las judías azukis, las alubias pintas, las alubias blancas o los fríjoles, con las que confeccionar ricos potajes. Es también la época de los alimentos negros y azules, colores que corresponden con el elemento agua de los riñones y ayudan a su fortalecimiento. Arándanos, moras y haba negras pueden ser una gran elección.

Las semillas contienen una enorme concentración de energía. Las de lino, calabaza, girasol y sésamo negro se relacionan con la fertilidad y el crecimiento que rige la energía renal. Los frutos secos tomados a discreción, especialmente nueces y avellanas, son también muy eficaces en esta época del año para generar calor.

Incluye también alimentos probióticos como el miso. Una buena sopa de miso es el plato perfecto para las comidas y cenas invernales (los japoneses incluso la toman para desayunar). Te ayudará a entrar en calor y relajarte… y, además, representa el fondo marino… Ideal para conectar con el elemento agua.

En cuanto a las verduras, elige las redondas, todo tipo de coles y hojas verdes pequeñas, e incluye raíces (como el nabos, las chirivías, las zanahorias o la bardana). Los riñones son las raíces energéticas de nuestro cuerpo y, si están bien nutridos, nos aseguramos una buena salud… en especial las mujeres.

En las comidas, elabora platos tradicionales de la dieta mediterránea, como la olla gitana o el potaje de garbanzos. Puedes sustituir los ingredientes desvitalizados por ingredientes más energéticos, como puede ser el arroz blanco por el integral o las verduras congeladas por las frescas. Si eres vegana o vegetariana, puedes sustituir las proteínas animales por proteína vegetal de buena calidad.

Alimentación en invierno.